La capital tinerfeña, entre las ciudades que más facilidades y mejor fiscalidad ofrece para la inversión.
El alcalde, José Manuel Bermúdez recogió recientemente la distinción que acredita el liderato de Santa Cruz de Tenerife en el Índice de Libertad Económica de las Ciudades Españolas (ILECE), otorgado por la Fundación para el Avance de la Libertad, presidida por Roxana Nicula, acto en el que también estuvo presente el secretario general de la entidad, Juan Pina.
Bermúdez quiso agradecer, “en primer lugar puso en valor este reconocimiento a la Fundación para el Avance de la Libertad, que lo es realmente a una trayectoria de varios ejercicios durante la que hemos tratado de establecer las condiciones para que Santa Cruz de Tenerife se desarrollase de manera más eficaz en materia económica y de empleo” y agregó que “incentivar el consumo, reduciendo la carga fiscal y promoviendo iniciativas que lo estimulen, es la manera que tiene este Consistorio de crecer y de generar oportunidades para las vecinas, vecinos y empresas, que son las generadoras de oportunidades de trabajo”.
“El ránking hecho público –destacó el primer edil- es una prueba de ello, ya que esta circunstancia permite un ahorro de más de 11 millones de euros cada año para miles de familias y pequeñas y medianas empresas” y afirma que “este tipo de políticas, que permiten que esa cantidad esté en manos de los chicharreros y chicharreras, y los autónomos de la capital, deben acompañarse por otras que incentiven el consumo y logren una eficaz circulación de los activos que se generan”.
“Así, todas las actividades que se celebran en la calle –ahondó José Manuel Bermúdez-, Plenilunio, dentro de dos semanas; el Carnaval, fiestas y medidas que incentivan el consumo, como los Bonos Consumo, cuya tercera edición acabamos de presentar, permiten que el músculo de empresas en el municipio y los niveles de empleo sean adecuados para garantizar una buena salud económica en la ciudad”, concluyó.
Por su parte, Juan José Martínez, concejal de Hacienda y Proyectos Estratégicos de la ciudad, puso en valor que “el ILECE, que en 2020 resultó ganador del Europe Liberty Award para proyectos de investigación en materia económica, es el primer análisis del grado de libertad económica derivada estrictamente de las políticas municipales en un mismo país” y añade que “por ello, las variaciones registradas en el clima de libertad económica de las ciudades ayudan a los responsables municipales a adoptar decisiones tendentes a su mejora, como es en este caso las acciones emprendidas en este municipio”.
Juan Pina, secretario general de la Fundación y coautor del ILECE, ha señalado que “las políticas públicas municipales tienen un efecto cada día mayor sobre la libertad económica general de empresas y particulares, atrayendo o expulsando tanto profesionales individuales como actividad económica” y recordó que “el diferencial entre la mayor y menor libertad económica local se sitúa en casi una cuarta parte de la escala de cien puntos totales” y apuntó que “el desempeño que el índice recoge en los casos de Santa Cruz de Tenerife es encomiable, al alcanzar la clasificación de libertad económica satisfactoria”.
“Pero también es lamentable –ahondó Pina- la baja puntuación que obtienen un año más las ciudades más pobladas de España, que suspenden o aprueban por muy escaso margen”, donde enfatizó “es particularmente mejorable el desempeño de Barcelona, Valencia y Madrid, que no alcanzan los cincuenta puntos sobre cien”.
